Partido Popular de Lugo

Los diputados gallegos del PP reclaman a Blanco que gestione ante Portugal una solución a los perjuicios que el previsto telepeaje automático del país luso causará a los automovilistas y transportistas gallegos

Madrid, 23 de junio de 2010.-  Los diputados gallegos del PP en el Congreso han presentado una pregunta en la Cámara Baja para que el ministro de Fomento, José Blanco, explique qué gestiones urgentes se están realizando ante el Gobierno portugués para evitar que la decisión del Ejecutivo luso de establecer peajes automáticos en las principales vías del norte del país provoque importantes perjuicios a los ciudadanos españoles, y gallegos en particular, que a menudo viajan al país vecino.

Los populares entienden que las trabas administrativas que esta situación provocará pueden entorpecer de forma importante el comercio, el turismo y la actividad económica entre Galicia y el norte de Portugal e, incluso, dudan de que esta decisión del Gobierno portugués no vaya en contra del artículo 3 del Tratado de la Unión Europea, que afirma textualmente: “La Unión ofrecerá a sus ciudadanos un espacio de libertad, seguridad y justicia sin fronteras interiores, en el que esté garantizada la libre circulación de personas conjuntamente con medidas adecuadas en materia de control de las fronteras exteriores, asilo, inmigración y de prevención y lucha contra la delincuencia”.

Los diputados gallegos del PP están preocupados por la implantación de los peajes automáticos en tres autovías del norte de Portugal, sin alternativa de pago en cabinas tradicionales, y por el efecto que esto conllevará en la movilidad de los automovilistas y transportistas gallegos en el país vecino. “No queremos que el norte luso se vea discriminado respecto a otras regiones de Portugal que no van a tener que soportar los inconvenientes de la medida”, señalan. 

Los populares recuerdan que España preside en estos momentos la Unión Europea y, por tanto, el ministro José Blanco preside el Consejo de Transportes de la UE, por lo que creen que está obligado, por su responsabilidad, a intentar “negociar” con su homólogo portugués unas condiciones que si bien no interfieran en la libertad del país vecino de organizar sus infraestructuras, sí garanticen la libre circulación de los miles de ciudadanos españoles y gallegos que cada día entran en Portugal.

«Estamos preocupados por la desinformación que hay alrededor de dicha decisión y el nivel de coordinación que podamos lograr con la Administración lusa para minimizar los inconvenientes que puedan tener los gallegos en sus desplazamientos por Portugal», indican los diputados gallegos del PP.