Madrid, 18 de noviembre de 2008.- El diputado lucense Joaquín María García Díez ha logrado hoy que la Comisión de Seguridad Vial del Congreso apruebe por unanimidad una Proposición no de Ley para instar al Gobierno a realizar los estudios necesarios para homogeneizar y definir las características constructivas, colores a utilizar y señalización vertical de los pasos de peatones en sus diferentes modalidades, priorizando la seguridad del peatón.
García Díez recordó en su intervención que España, con más de 43 millones de habitantes, se sitúa a la cabeza en muertes de peatones en relación al número de habitantes, con 15,7 muertes por millón de personas, y aunque precisó que la mayor parte de los peatones muertos (90%) lo son fuera de los pasos de cebra recordó que las estadísticas reflejan que los pasos de cebra salvan muchas vidas y que son mucho más utilizados en otros países de nuestro entorno porque su señalización y diseño son mejores.
Según el estudio Eurotest de análisis de pasos de peatones en Europa, “España presenta unas importantes carencias de diseño y señalización que hacen reducir la seguridad de los pasos de peatones sin semáforo”. Por ejemplo, nuestro país es, junto a Holanda, el único país europeo en el que no se especifica mediante señales a los conductores la necesidad de reducir la velocidad para ceder el paso a los peatones. Además, en España no se obliga a utilizar material antideslizante ni se recomienda el uso de pintura reflectante, lo que empeora la calidad de los pasos y hace que puedan pasar desapercibidos para los conductores y tampoco se exige una visibilidad mínima, por lo que los conductores muchas veces no pueden frenar a tiempo.
García Díez explicó también cómo las multas e infracciones a conductores que no respetan los pasos de cebra están en la franja más baja de toda Europa. En Austria o Bélgica, por ejemplo, la sanción puede elevarse hasta los 2180 euros, mientras que en España oscila entre los 91 y los 300 euros. Igualmente, el carné por puntos solo contempla restar dos puntos a los vehículos estacionados sobre un paso de peatones.
El Reglamento General de Circulación, en su artículo 168 apartado C, regula las marcas de paso para los peatones, con el siguiente texto: «Una serie de líneas de gran anchura, dispuestas
sobre el pavimento de la calzada en bandas paralelas al eje de ésta y que forman un conjunto transversal a la calzada, indica un paso para peatones, donde los conductores de vehículos o animales deben dejarles paso. (No podrán utilizarse líneas de otros colores que alternen con las blancas).»
A pesar de la claridad con la que está redactado y de ser aprobado en el año 2003, son muchas las ciudades que han optado por utilizar otros colores en la pintura de los pasos de peatones e igualmente en los últimos años ha empezado a proliferar la señalización de pasos de peatones situados a un nivel superior que el resto de la calzada para obligar a reducir la velocidad de los vehículos en su aproximación al paso de peatones.
Al igual que en el tema de los colores, en los pasos a diferente nivel se carece de normativa que regule sus características técnicas ni constructivas, actuando cada ayuntamiento a su sabio entender, por lo que el PP entiende que es necesario homologar las condiciones técnicas de los pasos de peatones en toda España y primar, ante todo, la seguridad de las personas.
La situación es aún más preocupante en Galicia, que es la comunidad con el mayor número de peatones muertos en carretera y que, según las estadísticas del pasado año, registra la cuarta parte de los atropellos mortales contabilizados en España en lo que va de año (220). Desde siempre, las muertes por atropello han teñido de negro las estadísticas del tráfico en la comunidad.