Madrid, 6 de noviembre de 2008.- El PP lamenta que el Gobierno no haya entrado en razones y haya rechazado la totalidad de las enmiendas presentadas por los populares para Galicia, que suponían un incremento de 370 millones de euros para la comunidad gallega.
Los populares no entienden cómo los diputados socialistas gallegos con la complacencia de los nacionalistas han aceptado ser partícipes de la aprobación de unas cuentas que ellos conocen que no se ejecutarán en buena parte y esperan que los gallegos sepan valorar la actitud de responsabilidad del PP a la hora de presentar un conjunto de enmiendas razonadas y ajustadas a las necesidades reales de Galicia.
El PP reclamaba, entre otras cuestiones, 309 millones de euros más para las obras del Plan Galicia, entre otras que se incrementase en 60 millones de euros la partida para la Autovía del Cantábrico, 35 millones para la autovía Santiago-Lugo, 32 para la autovía Lugo-Ourense, 30 para la Vigo-Pontevedra, 12 para la Chantada-Monforte, y 3 para el puerto exterior de A Coruña,
Además han sido rechazadas todas las enmiendas que buscaban incrementar proyectos de la alta velocidad que estaban infradotados como el AVE Vigo-Ourense, 20 millones, el AVE Ourense-Lugo, 7 millones, el AVE Ferrol-Coruña 10 millones, el AVE del Cantábrico 3 millones y el AVE del Eixo Atlántico 80 millones, entre otros.
También aquellas que incorporaban partidas para implantar el servicio de cercanías en Galicia, en las áreas metropolitanas de Coruña, Vigo y Ourense, así como para mejorar los servicios de media distancia de Galicia.
Los diputados populares gallegos lamentan que el Gobierno tampoco haya aprobado ninguna de sus propuestas en materia de medioambiente para Galicia, ya que esto supone dar la espalda a incrementos en las inversiones como por ejemplo para las estaciones depuradoras de aguas residuales (EDAR) de Santiago, Ferrol, Monforte (Lugo) y Ponteareas (Pontevedra); al saneamiento de ríos como el Miño o el Sil; al de las rías, como el caso de la coruñesa de O Burgo; así como a la restauración del espacio ocupado por explotaciones pizarreras o de playas y paseos litorales.