El Progreso (Kari Acebo). El presidente provincial del Partido Popular, José Manuel Barreiro, celebró ayer en Lugo una comida con una veintena de alcaldes y portavoces municipales del partido que en estas elecciones municipales abandonan la primera línea de la política local. Barreiro quiso destacar con el acto de confraternidad las buenas relaciones y la unidad que mantiene el PP a lo largo y ancho de toda la provincia lucense.
Como era de esperar, Barreiro aprovechó también el evento para mostrar su gratitud a los cargos salientes por el trabajo que hicieron en sus repectivos municipios durante su etapa en la pliítica local. Además, resaltó la fortaleza del Partido Popular, a la que reivindicó como primera fuerza política en Lugo y el partido más próximo a los ciudadanos. Ante los cargos que se van, defendió igualmente que todos forman parte de una fuerza que piensa “en resolver los problemas de la gente y no en crearlos”. Entre los asistentes a la comida se encontraban los ex regidores de A Pobra de Brollón, Manuel Casanova y David López Goyanes; el alcalde de Becerreá, Antonio Fernández Pombo; el de Samos, Carlos Belón Ares; el de Mondoñedo, Luis Rego Valcarce; el de Ourol, Guillermo Salgueiro Abad; el de Cervo, José Insua Pernas; el de Portomarín, Eloy Rodríguez López, y el ex regidor de Vilalba
Agustín Baamonde Díaz. La comida contó además con la presencia de los portavoces de los grupos municipales de A Fonsagrada, As Nogais, Cervantes, Monterroso, Viveiro, Rábade, Pedrafita do Cebreiro y Castroverde. Barreiro dijo que el trabajo realizado por todos constituye “un gran patrimonio político”.